Aunque el cannabis produce cientos de compuestos, solo dos cannabinoides, el THC y el CBD, han dominado la discusión sobre las propiedades medicinales del cannabis. Sin embargo, la realidad es que no solo estos compuestos son responsables de los usos medicinales del cannabis.Hay otros compuestos del cannabis que también pueden tener fuertes propiedades analgésicas.
Parece que los flavonoides serán unos importantes elementos en el rápido desarrollo del mundo de la marihuana. ¿Por qué son tan importantes? Porque, a pesar de que la investigación todavía está en su infancia, la investigación sobre «kannaflawin» (flavonoides de cannabis) ya da la esperanza de que algún día tengamos una forma completamente nueva de tratar el dolor.
FLAVONOIDES
Los flavonoides son sustancias químicas que se encuentran en todas las plantas (no solo en el cáñamo) que son responsables del pigmento en las frutas y verduras. Sin embargo, no todos los flavonoides tienen propiedades médicas, y los científicos han estado interesados en ellos por algún tiempo porque muchos de ellos exhiben propiedades antioxidantes. A menudo, cuando una planta se convierte en «súper alimento», tiene algo que ver con los flavonoides.
El cáñamo puede ser el siguiente, gracias a kannaflawine-A y kannaflawine-B, dos flavonoides del cannabis que tienen propiedades antiinflamatorias particularmente fuertes. Por ejemplo, son 30 veces más fuertes que la aspirina.
El posible efecto analgésico de las kannaflawin fue descubierto por primera vez por Marilyn Barrett, investigadora de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Londres en la década de 1980. Entonces, ¿por qué no hemos escuchado más sobre su efectividad? Dado que las kannaflawin constituyen un pequeño porcentaje de materia vegetal (0.014%), y para que funcione como un agente antiinflamatorio efectivo, necesitaría consumir grandes cantidades de cannabis. Del mismo modo, como el vino tinto, que teóricamente retrasa el envejecimiento. El fenol en las pieles de uva es responsable del retraso en el envejecimiento. Pero incluso si es bueno para nosotros (que nunca ha sido confirmado), tendríamos que consumir unos 40 litros al día para lograr un efecto terapéutico.
Sin embargo, los autores del estudio han identificado genes de cannabis que son responsables de producir kannaflawin, y esto permite obtener kannaflawin sin tener que cultivar la planta. El proceso fue patentado rápidamente con la ayuda de la Universidad de Guelph, Ontario en Canada. Poco después, la compañía de cannabis medicinal Anahit International adquirió una patente para la investigación en el desarrollo de productos comerciales con kannaflavine. Sin embargo, los investigadores son cautelosos sobre la posible eficacia de las kannaflawin, pero dada la crisis de los opioides, la posibilidad de utilizar un método alternativo para tratar el dolor es realmente interesante.
«Lo interesante de las moléculas de cannabis es que en realidad detienen la inflamación en la fuente», dice Tariq Akhtar, profesor asistente del Departamento de Biología Molecular y Celular de la Universidad de Guelph.
El uso regular de antiinflamatorios no esteroideos y otros analgésicos de venta libre (ibuprofeno) se asocia con un mayor riesgo de enfermedad renal y problemas estomacales. Incluso los analgésicos como el acetaminofeno, cuando se usan intensamente y en combinación con alcohol, pueden provocar problemas hepáticos. Los investigadores creen que los compuestos que se encuentran naturalmente en el cannabis podrían ser una nueva forma de tratar el dolor. Teniendo todo esto en cuenta, uno puede preguntarse por qué nadie usó el descubrimiento original de Marilyn Barrett en la década de 1980.
La razón de los retrasos podría ser la insuficiente tecnología y el estado legal del cannabis. Los científicos tuvieron problemas para encontrar fondos para el estudio de una sustancia ilegal, pero eso cambió en 2017 cuando Canadá legalizó la marihuana. Ahora los científicos no tienen problemas para encontrar fondos para la investigación, por lo que la investigación sobre las propiedades médicas del cannabis se ha acelerado, por lo que podemos esperar más investigaciones interesantes en el futuro.
Fuente: Fakty Konopne
